El Mundo Antiguo y La Tradición

En Las Tinieblas del Guerrero se narra la historia de un muchacho, Mythos, que ha sido separado de su familia y del mundo, vive aislado en la profundidad de un bosque.
Los orígenes de Mythos son humildes, su familia se ubica en una sencilla aldea de las montañas, junto con otras familias.
Conforman una aldea de muchas que hay repartidas por todo el planeta.
Pero esto no fue siempre así. En el principio, cuando el ser humano comenzó a tener conciencia de sí mismo y de cuanto le rodeaba, vinieron Los Doce, a cuya cabeza se encontraba un anciano ser al que llamaban Oren.
No se conoce de dónde vinieron, pero sí lo que trajeron consigo; lo que llamaron Sagrado contenido en un Arca, y con ello la Sabiduría del Todo, la cual legaron al mundo y a aquellos que moraban en él.
Esos privilegiados fueron conducidos a la cima de una montaña, a un lugar de gran poder, en el que construyeron un hogar denominándolo La Ciudadela de Los Antiguos, guardando a Sagrado tras sus muros y cultivando el conocimiento de la Sabiduría legada por Los Doce, haciéndola llegar al resto de seres del planeta.
Con el tiempo la sombra atenazó el mundo y a los habitantes de la Ciudadela, y un buen día aparecieron de nuevo los Doce y diseminaron a todos los habitantes de la Ciudadela a lo largo de todo el planeta, llevándose consigo a Sagrado y encerrando a Sagrado y el Arca en el interior de un templo construido para tal fin, denominado El Templo de La Luna, ubicación que estaría fielmente custodiada por los Cinco Guardianes Custodios, muchachos de las Aldeas que fueron formados y ordenados a tal efecto.